Operación de aumento de pecho en Cantabria

Nuestra operación de aumento de pecho en Cantabria, también conocida como mamoplastia de aumento, es una cirugía estética diseñada para mejorar el tamaño, la forma y la simetría de los senos. Es una de las intervenciones más populares dentro de la cirugía plástica y puede realizarse tanto por razones estéticas como reconstructivas, por ejemplo, después de una mastectomía.

 

La cirugía se lleva a cabo mediante la colocación de implantes mamarios o mediante lipotransferencia, que consiste en la inyección de grasa propia del paciente para aumentar el volumen de los senos. La elección entre estas técnicas dependerá de los objetivos estéticos, la anatomía de la paciente y la recomendación del cirujano. Existen diferentes tipos de implantes mamarios. Los más comunes son los implantes de silicona, que ofrecen un aspecto y tacto más natural, y los implantes de solución salina, que están rellenos de suero fisiológico y permiten un ajuste de volumen durante la cirugía.

 

 

En cuanto a la colocación de los implantes, estos pueden situarse en dos posiciones principales. La primera es la subglandular, que consiste en colocar el implante debajo del tejido mamario, recomendada para pacientes con suficiente volumen de mama natural. La segunda es la submuscular, donde el implante se coloca bajo el músculo pectoral, ideal para quienes tienen poco tejido mamario y desean un resultado más natural. El procedimiento se realiza bajo anestesia general y suele durar entre una y dos horas. Tras la cirugía, la recuperación puede tardar varias semanas, durante las cuales es importante evitar esfuerzos físicos y seguir las indicaciones médicas para garantizar una correcta cicatrización.

 

El aumento de pecho puede proporcionar resultados satisfactorios y mejorar la autoestima de muchas mujeres. Sin embargo, como cualquier intervención quirúrgica, conlleva ciertos riesgos, como infecciones, contractura capsular o posibles complicaciones con los implantes, por lo que es fundamental acudir a un cirujano plástico cualificado. Esto reducirá cualquier posible riesgo a un mínimo insignificante.